Es por la sudestada que sacudió la región en la madrugada del domingo, el barrio Nueva Esperanza fue el más castigado ya que más de un centenar de vecinos debieron dejar sus casas por el agua que ingresó. El mal tiempo no afloja y la situación tiende a empeorar.
Las familias afectadas fueron trasladadas por el municipio de Lomas de Zamora al centro de evacuación que montaron en la sede del programa Envión de Nueva Esperanza a la espera de que baje el nivel del agua.
Si bien se espera que en la mañana del lunes las condiciones climáticas tiendan a mejorar, la crecida del Arroyo del Rey por la sudestada tendría su momento más crítico en las primeras horas del día.