Vecinos de Lanús denunciaron que ayer a la noche hubo una violenta irrupción policial en el comedor Cartoneritos, del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTR), en Villa Caraza, partido de Lanús, en el sur del conurbano bonaerense.
Nicolás, uno de los responsables del comedor, contó: “No se sabe por qué entró la policía. ¡Y con tanta violencia! Estaban sacados”. Sigue su relato: “Anoche, la policía estaba haciendo operativos cerca del comedor. Paraban autos, controlaban. Eran un montón. Entonces una compañera se acercó para pedirles que se alejaran un poco, porque era un peligro que estuvieran de operativo, con tantas armas, tan cerca del comedor”.
“Esto está lleno de chicos. Funciona como comedor y guardería mientras los papás están cartoneando. Acá hay un montón de nenes y las compañeras que los cuidan”, explicó. Y después relató: “Fue una barbaridad. Cuando la compañera fue a pedirles que se alejaran, no le dijeron nada. Ninguno quiso identificarse ni nada”. “Al ratito, se nos vienen encima, con armas, gases… Hay un montón de nenes asmáticos acá, el gas los arruina. Los compañeros juntaron después casquillos y tacos de las armas de los policías. Y también hay compañeros heridos. Rompieron todo. No quedó nada en pie”, continuó.
“Entonces, unos compañeros quisieron impedir que se metieran en el comedor. Porque la cana avanzaba sin importarle que estuvieran los chicos. Entonces agarraron a los compañeros y se los llevaron. No nos dijeron a dónde. Primero nos dijeron que los habían llevado a la 5ª de Lanús. Pero los fuimos a buscar y nos dijeron que los habían llevado a hacer la revisación médica. Pero ahí tampoco están. Nadie se hace responsables”, insistió Nicolás.
Sobre los motivos del accionar policial, reiteró: “No sabemos, pero lo que sí sabemos es que desde hace meses la policía nos persigue, nos quiere asustar. Agarran a chicos de catorce años y los paran, los cachean, los dejan inmovilizados en el piso sin ninguna razón. Están ensañados con el comedor. Se ve que un montón de pibes comiendo y las compañeras que los cuidan les parecen peligrosos. Hace meses que nos persiguen”.