El único acusado por la muerte de Franco Sánchez, el joven de 25 años asesinado de una brutal golpiza el 8 de septiembre, continuará detenido. Es que la Justicia negó el pedido de excarcelación de su defensa y prorrogó el plazo para dictar la prisión preventiva por 15 días más, informaron fuentes judiciales.
El joven de 23 años, apodado “el Polaco”, fue aprehendido durante un allanamiento realizado en un barrio de Florencio Varela. En un principio se especuló con el cambio de caratula a “homicidio en riña”, lo que generó el repudio de los familiares de la víctima, aunque desde los Tribunales de Lomas de Zamora confirmaron que la acusación es “homicidio”.
Mientras tanto, continúa la investigación para dar con al menos un cómplice, que estaría identificado. En los próximos días, de hecho, se llevarán a cabo más allanamientos para dar con el sospechoso.
El caso. Franco Sánchez era papá de un nene de 4 años y trabajaba como albañil. La noche del jueves asistió junto a un amigo a un boliche y el viernes 8 a la madrugada fue atacado cuando se disponía a regresar a su hogar por un grupo de delincuentes que descendieron de un auto cerca de Pasco y Salta, barrio de San José, donde lo golpearon en la cabeza con un pedazo de cordón asfaltico para robarle.
Las imágenes de las cámaras de seguridad del local bailable comprobaron que en el interior no hubo ninguna pelea y testigos habrían visto como tras la gopiza, le quitaron la billetera. Sánchez agonizó durante varios días en el hospital Luisa C. de Gandulfo de Lomas de Zamora, donde finalmente falleció.