Los Andes era mas que Defensores lo ganaba y plasmaba un gran rendimiento. Pero se durmió en el complemento se lo dieron vuelta tras algunos errores y cayó 2-1, con tumulto en el cierre y un mal arbitraje de Meineri que no cobró dos penales.
Oswaldo Blanco a los 7 minutos del primer tiempo de cabeza sentenció el primero tras un centro de Pajón. Lo empató Bueno de arriba a los 5 y a los 28 Luciano Goux por varios errores defensivos le puso cifras definitivas al choque. Gagliardo y Noriega expulsados.
Un partido que tranquilamente se puede dividir en cuatro partes, todas importantes y varias determinantes. Un resultado increíble si se toma en cuenta lo visto en el primer tiempo, pero que sin duda, deja muchas enseñanzas para lo que viene
El primer acto con un solo equipo en la cancha. Un Los Andes activo, que presionó en todos los sectores, que no dejó jugar al rival, y a diferencia de otros juegos, tuvo la pelota y le dio dinámica hacia delante y los costados, buscando penetrar al rival
En la primera, una maniobra colectiva interesante a lo ancho de la cancha terminó con un soberbio remate de Blanco que pasó al lado del ángulo.
Pajón inteligente para leer el encuentro y con centros que eran una daga. Los del fondo igual que siempre, Vicente asomando por izquierda, y el punto mas alto, Ricardo Vera, suelto, haciendo las veces de conductor y con nitidez para habilitar a sus compañeros.
Enfrente, un timorato Defensores, que solo encontraba algo de aproximación por izquierda, con la dupla Nadal-Vergara, mas la tenacidad de Bueno y un Sosa que aguantaba como podía en el centro.
A los 7, Soriano sacó un centro que pegó de manera intencional claramente en la mano de Nadal. Claro penal no cobrado, pero que en ese momento pasó rápido el enojo porque del guante que tiene en el pie derecho Pajón se plasmó un envío que Oswaldo Blanco, el goleador de Los Andes, capitalizó y mandó al fondo de la red cruzándola al palo derecho.
Era todo de Lomas en la cancha de Quilmes, cómodo con la diferencia el trámite lo favorecía. Un par de centros con veneno de Pajón no pudieron encontrar a Soriano, y si a un Anconetani con dudas. Los dos centrales, Goux y Alberich amonestados por ir fuerte ante el colombiano y una última posibilidad que podría haber cambiado el rumbo del cotejo
Soriano quedó mano a mano con el ex Italiano pero su zurdazo fue débil, e hizo estirar a un arquero que controló en dos tiempos. El “Pollo” tiene muchas entrega, pero a la hora del gol, porque para eso lo trajeron, está errático. No pisa demasiado el área y es un puntero izquierdo, sin demasiada gravitación
La segunda parte de estos 90 minutos fue toda desfavorable, pero no porque el rival haya sido más, sino por un gol tempranero, una siesta que deparó en la caída e incidencias que no ayudaron.
Cinco minutos y ese tanden nombrad de Nadal-Vergara gestó el centro para que Pablo Bueno, un interesantísimo delantero, decretara de cabeza el 1-1.
Pajón marcaba a Vergara, y ninguno de los dos mediocampistas centrales entendió que tenía que ir por Nadal, para que no le hagan al ex Merlo el “Loco”, ya que estaba en inferioridad
A 17 minutos para el final y luego de un ataque de Defensores, Blanco perdió en la mitad, los jugadores quedaron parados porque pensaron que iban a cobrar falta del colombiano contra Monge, la jugada siguió y los del fondo salieron sin referencia de marca, por lo que quedaron tres jugadores totalmente habilitados del “Dragón”. Uno, Luciano Goux que con un remate cruzado le daba una ventaja inmerecida a la visita.
Allí arranca la tercera parte de la historia que se divide en dos segmentos. Una los nervios del entrenador de Los Andes por fallos que creía lo perjudicaban (en la mayoría tenía razón), pero que no lo dejaron leer que los cambios eran antes, cuando el cotejo se hizo chato en el 1-1 y necesitaba un golpe de timón para volver a tener la pelota y ser protagonista. Noriega y Ortiz, que hicieron poco, podrían haber entrado antes para darle frescura cuando todavía la situación no era tan negativa y si equilibrada con aquella paridad transitoria.
Luego lo de Gastón Meineri, obviando un claro penal en el comienzo, una falta de Goux contra Blanco teniendo amarilla, una dudosa contra Noriega donde se vienen agarrando con el defensor en el área, y la última, donde Pajón es derribado a los 44 y era penal para el local.
El cuarto punto de la historia, el final, lamentable. Si bien las revoluciones están a mil por hora, los jugadores tienen que entender que son profesionales, que perjudican al plantel, al equipo, a sus compañeros. Y que además, hay que empezar a dar el ejemplo de arriba hacia abajo y no generar mas violencia, como la de los directivos del equipo del Bajo Belgrano que colgados, gritaban y hacían gestos obscenos
Un final sorpresivo porque la sensación era que Los Andes mereció mas por ese gran primer tiempo hecho, pero en la “B” Metropolitana, como diría un afamado relator, “Cocodrilo que duerme es cartera”
Por último, Maximiliano Gagliardo y Alejandro Noriega se pierden el duelo que viene dado que fueron informados por lo del cierre.