Los Andes perdió otra oportunidad de entrar al Reducido tras caer 1-0 ante Atlanta por el gol de Godoy de penal. Jugó mal, tuvo tres expulsados, otra vez quejas para un árbitro, pero aun así, depende de si mismo. Si le gana a Armenio el martes estaría en el cuadrangular, dado que Morón queda libre y Defensores están en descenso. A los 22 del complemento el ex Talleres marcó la única distancia. Noriega, Gagliardo y Zeballos vieron la roja al igual que Collavini.
Tan cerca está, pero por ahora afuera. Tantas chances ha tenido y tiene, pero hasta el momento este Los Andes ocupa el sexto lugar de la tabla y mira desde la puerta el torneo Reducido
Porque si bien ganando el martes estaría ocupando una posición de privilegio, dado que Morón queda libre y Defensores hasta el momento no puede clasificar por estar en descenso directo, el rendimiento está muy lejos de lo esperado, o de un equipo con intenciones de ascender.
Porque luego habrá otra vez un párrafo aparte para el tema árbitros, peso en AFA, y a aquellas personas a las cuales vos decidiste enfrentarte. Pero esto, no debe ser el árbol que tape el bosque, ya que los de Nardozza mostraron una pálida imagen en Villa Crespo.
Quizás hizo más méritos Los Andes para perder, que Atlanta para ganar, pero un penal fue la diferencia entre los dos conjuntos.
Porque no se patearon demasiado al arco, pero la sensación de manejo del balón del local fue clara, sin profundizar, solo aproximando o insinuándose.
A este equipo, que tiene ímpetu para ir hacia delante le faltan hojas en el libreto ofensivo, porque Ricardo Vera no es el mismo de Chicago y Merlo, Bevacqua no ha podido desnivelar, Pajón no ha venido para eso, Lorefice hoy estuvo mas contenido, y Noriega suele realizar el trabajo sucio y del área, pero debe ser abastecido.
Con todo esto y situaciones donde los árbitros no miden con la misma vara, el resultado final es una caída, que duele, que no es determinante, pero que desnuda falencias dentro de la cancha y en la semana por fuera de lo futbolístico.
Porque ninguna de las tres expulsiones se ponen en tela de juicio, dado que Frances tuvo que ser retirado de la cancha con sangre, Gagliardo embistió a Godoy como último hombre, y Zeballos cuando el esférico no estaba dentro de la cancha, y delante de Stoklas, lo tocó al mediocampista de Atlanta.
El penal contra Ledesma no deja dudas, pero la sensación es que no se es tan severo con el rival, (ejemplo Frances) y que cuando este “Milrayitas” trata de asomar la cabeza, alguien con el martillo se la baja.
Una primera parte donde el “Bohemio” hizo tenencia, trató de utilizar el costado derecho de su ataque con la dupla Galeano-Guzman para penetrar, pero salvo un remate de media distancia y un cabezazo de Frances, no plasmó peligro.
Los Andes fue menos que eso, no tuvo un tiro directo a un Vega que fue un espectador. Sin profundidad, no rompió desde la mitad, y tuvo errático a Vera.
En el segundo tiempo se contabiliza una doble salvada de Gagliardo fenomenal tras un cabezazo de Godoy en el palo izquierdo que voló para tocar y posteriormente con el pie la tiró al córner.
Los de Lomas contaron con una clara, un derechazo de Pajón que cruzó el área y se fue cerca del caño diestro.
El local seguía haciendo posesión, la visita tenía a su línea media mas cerca de Gagliardo que de Noriega y por ello, vino el tanto que decretó el triunfo.
Se lo llevaron por delante a Ledesma a los 22 minutos y fue Godoy con un certero remate al medio quien impuso la ventaja para los de Mayor.
Todos fueron nervios y mas cuando a los 29, Noriega ya amonestado, forcejeó con un Frances (que hizo lo que quiso sin tener sanción alguna) que se dejó caer tras un golpe del delantera. Roja para el optimista y malas noticias.
Cinco minutos mas tarde, ya con Blanco y Ortiz en la cancha, Collavini se fue expulsado directamente por golpear a un hombre de Los Andes.
¿Renacía la esperanza?. No, las tarjetas que te llevan a las duchas desfilaron, primero para Gagliardo, quien como último hombre derribó a Godoy, y luego para Zeballos, que sin pelota, delante del árbitro tocó a un rival.
Soriano ya ingresado y ovacionado tuvo el empate, pero la picó de manera suave a las manos del arquero.
Fue final, un Atlanta que se revitalizó y sueña con el Reducido, un Los Andes que lo mira de afuera, aun con chances claras.
El vaso medio lleno, es que ganando el martes estás adentro a dos fechas para el final. El pocillo medio vacío es que debes modificar ya cuestiones del rendimiento colectivo e individual, y mas allá de creer o pensar (justificadamente) que los arbitrajes no son imparciales, se debe intentar vivir con ello y no cometer algunas fallas por los nervios como en la noche del León Kolbowski.